Á ENRIQUE TAMBERLICK. Del corazón las ii?noradas cuerdas Que uiano alguna las hipíó jamás; Del ponsaniiento la pesada y lól^rega TeiTÍl^íi oscuridad : Los taisterios del alma , en cuyo abismo Nadie aeierta á mirar. Cuanto en el ser desconocido vive Tu lo haces con delirio palpitar. Brotan de tí torrentes de armonía, Olas de luz, ambiente celestial Como lluvia de ideas que descubren Toda una eternidad. D. Guerrero y Polo.